Era una de las reivindicaciones de los ayuntamientos españoles y, finalmente, se ha conseguido. La Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y el Ministerio de Hacienda y Función Pública han acordado ampliar el listado de inversiones financieras sostenibles que los ayuntamientos pueden realizar con el superávit obtenido en 2017, cifrado en más de 5.000 millones de euros.

El acuerdo, alcanzado en una reunión celebrada el pasado 6 de marzo, permitirá realizar inversiones en infraestructuras educativas, culturales y deportivas, gestión de residuos, seguridad y protección civil y mejoras en el equipamiento de las dependencias municipales.

Queda pendiente la inclusión de los programas de fomento del empleo. Según la FEMP, el Gobierno comparte la idea de que esta línea puede ser incluido como destino del superávit, pero quedan por solventar algunas dudas técnicas al respecto.

El compromiso del Ejecutivo verá la luz en forma de Decreto Ley este mismo mes de marzo, lo que permitirá, desde abril de este año hasta abril del próximo, “decidir las inversiones, licitarlas y, posiblemente, ejecutarlas”.

 

Los ayuntamientos: la administración más cumplidora

Las cifras de los últimos ejercicios económicos evidencian que los ayuntamientos han sabido acomodar sus gastos a los ingresos. Si en 2016 lograron un superávit de 6.487 millones de euros, está previsto que la cifra del pasado ejercicio ronde los 5.000 millones.

Pese a que cerca de 3.000 ayuntamientos cumplen con la estabilidad presupuestaria y no tienen deuda, la regla de gasto que el Ministerio de Hacienda estableció en 2012 para el conjunto de las administraciones públicas no les permite gastar más allá de las previsiones de crecimiento de la economía española.

Un millar de ayuntamientos pudieron invertir parte de su superávit en acciones que no generaron gasto recurrente y en amortizar deuda, siempre respetando la Ley de Estabilidad Presupuestaria.

La consecuencia directa de esta limitación es que los municipios están ahorrando dinero ante la imposibilidad de gastarlo con libertad. Este ahorro podría situarse en los 27.500 millones de euros.

Ahora, con el nuevo programa de inversiones, los ayuntamientos podrán invertir sus ahorros en mejoras en sus municipios.